lunes, 31 de agosto de 2009

Ojalá

Ojalá que te bebas mis sueños,
que mi nombre se extienda por todo tu cuerpo.
Que me pierda en tu piel de aceituna
en las lentas horas de abril y de luna.
Ojalá a mi cinturase amarre
la cinta de tu sangre oscura.
Y que por tus labios húmedos
y sabios transiten mis besos de óxido y de llanto.
Ojalá que asciendas por mi sangre
enhiesta con la fiebre izada como una bandera.
Aunque luego huyas.
Aunque nunca vuelvas.
Aunque torne negra esta primavera.
Aunque yo me muera.

Isabel Rodriguez Baquero
A veces uno es manantial entre rocas y otras veces un árbol con las últimas hojas.
Pero hoy me siento apenas como laguna insomne con un embarcadero
ya sin embarcaciones una laguna verde inmóvil y paciente
conforme con sus algas sus musgos y sus peces,
sereno en mi confianza confiando en que
una tarde te acerques y te mires,
te mires al mirarme.
Benedetti

viernes, 28 de agosto de 2009

Necesito de ti, de tu presencia...

Necesito de ti, de tu presencia,
de tu alegre locura enamorada.
No soporto que agobie mi morada
la penumbra sin labios de tu ausencia.
Necesito de ti, de tu clemencia,
de la furia de luz de tu mirada;
esa roja y tremenda llamarada
que me impones, amor, de penitencia.
Necesito tus riendas de cordura
y aunque a veces tu orgullo me tortura
de mi puesto de amante no dimito.
Necesito la miel de tu ternura,
el metal de tu voz, tu calentura.
Necesito de ti, te necesito.

jueves, 27 de agosto de 2009

Podría perfectamente suprimirte de mi vida,
no contestar tus llamadas,
no abrirte la puerta de la casa,
no pensarte, no desearte,
no buscarte en ningún lugar común
y no volver a verte,
circular por calles por donde sé que no pasas,
eliminar de mi memoria cada instante
que hemos compartido,
cada recuerdo de tu recuerdo,
olvidar tu cara hasta ser capaz
de no reconocerte,
responder con evasivas cuando me pregunten por ti
y hacer como si no hubieras existido nunca.
Pero te amo...
.
Dario Jaramillo
Nunca fue tan hermosa la mentira
como en tu boca,
en medio de pequeñas verdades banales
que eran todo tu mundo que yo amaba,
mentira desprendida sin afanes,
cayendo como lluvia sobre la oscura tierra desolada.
Nunca tan dulce fue la mentirosa palabra enamorada
apenas dicha,ni tan altos los sueños ni tan fiero el fuego
esplendoroso que sembrara.
Nunca, tampoco,tanto dolor se amotinó de golpe,
ni tan herida estuvo la esperanza.
Piedad Bonnett

miércoles, 26 de agosto de 2009

De sólo imaginarme que tu boca pueda juntarse con la mía,
siento que una angustia secreta me sofoca,
y en ansias de ternura me atormento...
El alma se me vuelve toda oído;
el cuerpo se me torna todo llama
y se me agita de amores encendido,
mientras todo mi espíritu te llama.
Y después no comprendo, en la locura,
de este sueño de amor a que me entrego;
si es que corre en mis venas sangre pura,
o si en vez de la sangre corre fuego...

ALICIA LARDE DE VENTURINO ( El Salvador )
En silencio
.
Así, calladamente
sin grandes estridencias
dejaré de quererte
casi sin darte cuenta.
Dejaré de sentirme muñeca,

entre tus brazos,
dejaré de temblar
por tus caricias nuevas.
Y así... pausadamente

como llega la noche
aún estando a tu lado
comenzaré a estar muerta.

CARMEN SÁNCHEZ IBÁÑEZ ( España, 1936 )

martes, 18 de agosto de 2009


Tú, que hieres
.
Arrebatadamente te persigo.
Arrebatadamente, desgarrando mi soledad mortal,
te voy llamandoa golpes de silencio.
Ven, te digo como un muerto furioso.
Ven. Conmigo has de morir.
Contigo estoy creando mi eternidad.
(De qué. De quién).
De cuando arrebatadamente esté contigo.
Y sigo, muerto, en pie.
Pero te llamo a golpes de agonía.
Ven. No quieres.
Y sigo, muerto, en pie.
Pero te amo a besos de ansiedad y de agonía.
No quieres. Tú, que vives.Tú, que hieres
arrebatadamente el ansia mía.

viernes, 14 de agosto de 2009

SED DE TI
.
Sed de ti me acosa en las noches hambrientas.
Trémula mano roja que hasta su vida se alza.
Ebria de sed, loca sed, sed de selva en sequía.
Sed de metal ardiendo, sed de raíces ávidas......
Por eso eres la sed y lo que ha de saciarla.
Cómo poder no amarte si he de amarte por eso.
Si ésa es la amarra cómo poder cortarla, cómo.
Cómo si hasta mis huesos tienen sed de tus huesos.
Sed de ti, guirnalda atroz y dulce.
Sed de ti que en las noches me muerde como un perro.
Los ojos tienen sed, para qué están tus ojos.
La boca tiene sed, para qué están tus besos.
El alma está incendiada de estas brasas que te aman.
El cuerpo incendio vivo que ha de quemar tu cuerpo.
De sed. Sed infinita. Sed que busca tu sed.
Y en ella se aniquila como el agua en el fuego.
Pablo Neruda

miércoles, 12 de agosto de 2009

Porque el tiempo se mide, no se cuenta,
su luz a la distancia sobrevive,
el aire pierde espacio en la tormenta
y en el suelo extraño se percibe.
Porque el tiempo, se goza,
no se cuenta la secreta aventura que se vive,
burlas del horror y sed nos alimenta
y en alta noche amor su mano escribe.
Cuando en los ojos de la infancia advierto
el color sin colores de la vida que al agua
de los años diluye,
busca mi sed el agua que no ha muerto,
que aquí en la soledad de su guarida el alma se hace,
el cuerpo se destruye.
montellano

sábado, 8 de agosto de 2009

Me tienes en tus manos...
Me tienes en tus manos y me lees lo mismo que un libro.
Sabes lo que yo ignoro y me dices las cosas que no me digo.
Me aprendo en ti más que en mi mismo.
Eres como un milagro de todas horas,
como un dolor sin sitio.
Si no fueras mujer fueras mi amigo.
A veces quiero hablarte de mujeres
que a un lado tuyo persigo.
Eres como el perdón y yo soy como tu hijo.
¿Qué buenos ojos tienes cuando estás conmigo?
¡Qué distante te haces y qué ausente cuando a la soledad te sacrifico!
Dulce como tu nombre, como un higo,
me esperas en tu amor hasta que arribo.
Tú eres como mi casa,eres como mi muerte, amor
Jaime Sabines.
Amor mío, mi amor, amor hallado de pronto
en la ostra de la muerte.
Quiero comer contigo, estar, amar contigo,
quiero tocarte, verte.
Me lo digo, lo dicen en mi cuerpo
los hilos de mi sangre acostumbrada,
lo dice este dolor y mis zapatos y mi boca y mi almohada.
Te quiero, amor, amor absurdamente, tontamente,
perdido, iluminado, soñando rosas e inventando estrellas
y diciéndote adiós yendo a tu lado.
Te quiero desde el poste de la esquina,
desde la alfombra de ese cuarto a solas,
en las sábanas tibias de tu cuerpo
donde se duerme un agua de amapolas.
Cabellera del aire desvelado, río de noche,
platanar oscuro, colmena ciega, amor desenterrado,
voy a seguir tus pasos hacia arriba,
de tus pies a tu muslo y tu costado.
//
Jaime Sabines